Tres eran tres.

Deberes hechos. Ropa preparadita y zapatos limpios, como debe ser.

Estoy desayunándome un café a pachas con la prensa diaria y el google reader antes de la «operación niño», esa que consiste en preparar biberones, despertar fierecillas y acicalarlas para el largo día de labor… lo que, en tiempos de cambio de hora, suele ser pelín dramático… como dice Manolo Saco, «Que a las dos de la madrugada sean las tres tiene un pase. ¿Pero quién mete de pronto en la cama a un niño a las nueve de la “noche” con el sol brillando todavía en el firmamento?»

Tengo la costumbre de levantarme un buen rato antes que mi familia, lo que me permite disfrutar de este ratillo extra para mí solita, degustar tranquilamente el café y reordenar pensamientos tras el sueño.

Para hoy, tres lecturas interesantes:

  • Los últimos posts de Marc Vidal, mi gurú particular de la economía… Aunque no me suele gustar nada lo que leo… pero siempre es muy interesante.

Que ustedes lo pasen bien. Intentaré hacer lo propio.

  1 comment for “Tres eran tres.

  1. 31 marzo 2008 at 8:04

    Agradezco la interesante reseña de blogs que vale la pena leer sin que suponga una pérdida del tiempo. Me ha gustado el comentario de Marc Vidal, una entrada esclarecedora. Gracias por las recomendaciones, son saludables a esta hora (nueva je 🙂 – de la mañana.

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