Tiempo

Nuestro tiempo es finito.
Nos nacen, vivimos… y después nos morimos. Que muramos antes o después depende de mil factores e incluso del azar.
Jugamos una mano de cartas que nos viene dada y a lo largo de la vida podemos ir haciendo descartes para tener la jugada maestra o farolear o lanzar órdagos… y así hasta el final.
Lo bueno es que podemos ir cambiando de cartas o haciendo lo que podemos con las que nos tocan, pero en nosotros está. Siempre hay opciones.
Lo malo es que el tiempo pasa rápido, muy rápido… y cuando te das cuenta y miras hacia atrás, flipas y no das crédito de todo lo que has vivido hasta el momento que sea. Más o menos alrededor de los 25 años empiezas a tener conciencia de todo esto y es cuando tus recuerdos empiezan a pesar. Y, según van pasando los años, la cosa se acelera…
Pero no es bueno vivir anclado en los recuerdos. Nos tienen que servir para mejorar nuestras cartas y nuestras jugadas porque sólo tenemos una vida. Apabulla pensarlo, pero es que es así.
Me vienen a la mente mil frases hechas y casi todas son verdades verdaderas. Da igual lo que hoy veas claro si cuando se te presentó una oportunidad no la aprovechaste. Las oportunidades son como el propio tiempo: llegan y se pasan. Con suerte, tendrás segundas oportunidades… pero esto no siempre será así, de hecho, casi nunca será así.
Hay que activar la capacidad de generar nuevos sueños para seguir adelante, para inventarte mil jugadas, para seguir en la partida… porque no tenemos otra.

  1 comment for “Tiempo

  1. Pingback: Bitacoras.com

Comments are closed.

Additional comments powered by BackType