Pequeña divagación sobre las discográficas

Después del comentario de Javi Moscas en el post anterior, me he parado a pensar en la forma en la que él llegó a un grupo de música excepcional, de éxito internacional, por supuesto, allende nuestras fronteras…

La SGAE se queja sin cesar que si la piratería patatín, que si la piratería patatán, surgen a su cobijo asociaciones diversas, como la FAP…

Pero, ¿quién coño decide por mí la música que yo escucho? Si a mí lo que me pone es Matti Esko, Les Cowboys Fringants, Los Bacon Brothers o Florent Pagny… ¿por qué tengo yo que acudir a la red para poder tener algo de música de estos artistas?

Es que tiene mucha gracia la cosa.

A finales de los 80 (mocilla yo…) solía veranear en Francia, donde mucha de la música internacional que se escuchaba (claro, por supuesto que no hablo de grupos locales) aquí no existía.
A INXS les conocí en Francia muuuucho antes de que aquí pegara el Need you tonight (un año después por lo menos del lanzamiento del disco). A Midnight Oil idem de lienzo.

Son las discográficas las que deciden qué nos ha de gustar al público español (igual que hace unos días una distribuidora decidía que el acento mexicano no era lo suficientemente bueno para nuestros oídos), lo que se ha de poner en nuestras radios, las canciones que se promocionan en televisión, en tonos, politonos, semitonos y demás…
Lo que a ellas les jode es que no entremos a su trapo.

No soy especialmente alternativa para la música, pero no sopo no sopo no soporto el rap, ni tampoco que me tomen el pelo.

  16 comments for “Pequeña divagación sobre las discográficas

  1. Freia
    23 noviembre 2007 at 20:06

    No, si yo no le doy la razón ni mucho menos a las discográficas y tiene toda la razón Maripuchi en que como busques algo un poco raro y tengas que importarlo encima, vas dado; digo simplemente que a mi me parece la cosa muy complicada y que los intereses de unos entran en conflicto con los de otros. Simplemente, no es un problema de fácil solucion. Cuando Bisbal, por muy manta que sea, graba un disco no sólo trabaja él (seguramente él es que menos curra). En fin, no sé, es complicado. Yo no lo tengo nada claro.

  2. Maripuchi
    23 noviembre 2007 at 19:26

    Nerea.
    A mí, en según qué contexto y según qué libro no me daría ningún apuro decir que lo pirateo.
    ¿A tí no te ha tocado nunca comprar un libro de texto del que sólo vas a utilizar un capítulo? A mí sí… Algún iluminado profesor de carrera … y claro, como que no me voy a gastar la pasta que cuesta todo el tocho para veinte o cuarenta cochinas páginas…

    A mí una solución buena me parece el tema de itunes. Puedes comprar un tema suelto o el disco entero (claro que en formato digital… pierdes el encanto del CD físico, si es que te gusta)… Un CD te sale por menos de 10 euros… un precio lógico y pagable… no las barbaridades que piden ahora por los CDs…

    Que yo no necesito mansión en Miami, con tener un pisito en Vitoria me conformo…

  3. ilegorri
    23 noviembre 2007 at 18:46

    Bueno, que se relaje Bisbal, no tengo intención de bajarlo de la red. Que se quede ahí. Reconozco que lo que a mi me gusta está tan desfasado -es que una va cumpliendo años y es de ideas fijas- que tengo que recurrir a la red. Pero estoy deacuerdo con Freia, los derechos de autor, y el respeto al trabajo de las personas también es necesario. No sé bien como podremos concienciar a la gente, de que con la piratería no respetamos a muchos autores. Recuerdo antaño, cuando se fotocopiaban libros sin pena ni gloria, hoy -a mi por lo menos- me daría verguenza reconocer que pirateo libros, ¿a vosotros no?

  4. Ruth
    23 noviembre 2007 at 18:13

    ¡Olé, olé y olé! Completamente de acuerdo. No me gusta Bisbal, ni La Oreja de Van Gogh, ni nada que suene a «triunfito»; me gusta la música británica y un poco rara -no demasiado, pero lo suficiente para que el disco ya suba un pico- y no tengo un duro, así que o pirateo, o no escucho música. Y no me da la gana, leche, que bastante aporto a la sociedad.
    ¿Qué aportan las discográficas al mundo, que son al final las que se quedan con el dinero? ¿Me va a decir Alejandro Sanz que no le llega para otra casa en Miami? Amos, hombre, a otro perro con ese hueso…

  5. Maniobras Orquestales... en la Blogscuridad
    23 noviembre 2007 at 15:59

    Un día de estos pienso crear un blog alabando a Microsoft (¡Viva Windows! ¡Muera Linux!), a la SGAE, a Ramoncín, a Bisbal, a Camela, al Rey de España, a Isabel San Sebastián, a Fedeguico, a las rubias de bote que aparcan en doble fila sus mastodónticos X3 para dejar a sus retoños en colegios privados a las 9 de la mañana (¡coño, ni una puta coma!), a los jueces de la Audiencia Nacional, a la ministra Maleni, al déficit fiscal de Cataluña, al AVE, a Orange, a Pedro J., el InMundo, a la Pataky (es que no sé qué le ven),… ¡Y lo que me ahorraré de psicólogos!

    ¡Buen finde, Mari!

    Xavier – Tarragona
    Maniobras Orquestales… en la Blogscuridad

  6. Maripuchi
    23 noviembre 2007 at 13:57

    El problema, Freia, viene cuando quieres algo de alguien que aquí no existe… No siempre puedo encargar a alguien que me traiga un CD de EEUU….

  7. El Hermano Montgolfier
    23 noviembre 2007 at 11:57

    Pues agarrense amigos, en breve todos los poseedores de un ordenador seremos presuntos piratas copiones, y por tanto pagaremos un canon para la SGAE, ya no sólo por los CDs y DVDs vírgenes que compremos, sino además por los discos duros, los reproductores de mp3, las grabadores de CD/DVD y, si los SGAinos se empeñan un poco, también de nuestra conexión a Internet (por si no fuera poco que somos el país europeo que más cara para la conexión).

    En fin, yo para fastidiar pienso descargarme toda la discografía de Ramoncín, de Bisbal, de Amaral y de la Oreja de Vangoh, después voy a borrarlas, después a volver a descargarla, y así todos los días.

  8. Freia
    23 noviembre 2007 at 11:56

    Estáis hablando de un tema que me parece muy, muy peliagudo y al que yo no le veo una solución clara. Estoy con vosotros en que hay que pararles los pies a las discográficas, que sacan unos beneficios inmorales y que además con su poder manipulan los gustos de la opinión pública. Por eso también la red les da tanto miedo y se han visto obligados a pasar por el aro, para seguir sacando beneficio. Pero también se plantea el problema de los derechos de autor. Tampoco me parece justo ni lógico que un autor vea como un producto suyo tiene éxito y es reproducido por todas partes y a todas horas y que él, que es el padre de la criatura, vea como todo el mundo se beneficia de ello menos él. Siempre me ha parecido un problema complicado, sobre todo desde que existe la red y yo no veo una solución clara al respecto para que todos podamos estar contentos. Yo sigo comprando discos en tiendas y circuitos habituales y me toca las narices que un buen porcentaje del precio del disco se lo queden las distribuidoras (multinacionales en la mayoría de los casos), pero la piratería me da alergia, no puedo remediarlo. Pienso que de los males, el menor y sigo comprando religiosamente los discos, porque también hay mucho ingeniero de sonido y mucho intérprete que tiene que vivir de su trabajo. No sé, me parece un tema muy complicado y de difícil solución.
    (siento haberlo hecho tan largo)

  9. J. G Centeno
    23 noviembre 2007 at 10:52

    Asi que no quereis oir a Bisbal, ni a los fenómenos de estas colosales operaciones de marketing que nos colocan las televisiones. Y encima quereis oir música que no está en los circuitos de las radio-fórmulas. Sois unos antisistema, acabareis siendo comunistas, o peor ¡anarquistas!.
    ¡Viva Perales!:
    «Porque tu eres mariposa entre las rosas,
    pero ella es el cimiento de mi hogar»

    ¡Manda güebos!

  10. M.Angel
    23 noviembre 2007 at 8:33

    Lo de la sgae es un robo.
    Encima hay que oir al bisbal pidiendo la desaparición de programas informáticos como el emule, que gracia me hizo el jodido, como espere que compre sus discos, lo lleva clarinete, ni regalados.

  11. Bernardo Muñoz
    22 noviembre 2007 at 23:39

    Uno escucha de todo pero es bastante crítico con lo que mantiene en el tiempo. Más de la mitad de lo que me descargo lo borro al poco de escucharlo, pues creo que no merece la pena guardarlo.

    Lo jodido es que cuando los adquiría en la tienda -y yo era de los de uno por semana, al menos- me sucedía algo parecido y eso sí que duele.

  12. Maripuchi
    22 noviembre 2007 at 21:22

    Bienvenida, Tocotó.
    Yo los originales me los compro en casos MUY puntuales. En cualquier caso, hay música a la que no se puede acceder si no es a través de la red, como la de los Bacon Brothers…
    Este caso concreto me resulta llamativo, habida cuenta que es el grupo que Kevin Bacon (el actor) tiene con su hermano. Suenan realmente bien y no creo que tuvieran muchos problemas para venderse fuera de EEUU…

  13. Tocotó
    22 noviembre 2007 at 20:46

    Tienes toda la razón, nos meten por los oídos la «fantástica» música española y se quedan en el tintero cerdaderas maravillas. Yo soy de las que descargan música pero cuando un grupo me gusta y me ofrece algo más me lanzo a por el original. Si hasta he pagado por un disco edición especial que me llegará en agosto del 2008…

    Incluso muchas veces te descargas el disco para ver cómo suena tal o cual grupo y te acabas enganchando y comprando el cd como me pasó con los athlete…

    Lo de la SGAE no tiene nombre, ahí sí que son muchos a robar, a tomar por culo la presunción de inocencia. A ver si no se le da a Hacienda por copiar el método y se inventa un nuevo impuesto porque como hay gente que defrauda…

  14. javierM
    22 noviembre 2007 at 19:56

    Por eso tanto miedo a la red. La democratización cultural significa que te libras de su dictadura y tipos como Bisbal jamás triunfarían ni con operaciones ni sin ellas…

    Se les jode el negociete

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