Sinvergüenzas

Y dice el DRAE.

Que un sinvergüenza es:

1. adj. Pícaro, bribón.

2. adj. Dicho de una persona: Que comete actos ilegales en provecho propio, o que incurre en inmoralidades.

También dice que un pícaro es:

1. adj. Bajo, ruin, doloso, falto de honra y vergüenza

2. adj. Astuto, taimado.

3. adj. Que implica cierta intención impúdica.

4. adj. Dañoso y malicioso en su línea.

No falto, entonces, a la verdad, si digo que Esperanza Aguirre y su corporación de Gobierno de la Comunidad Autónoma de Madrid son una panda de sinvergüenzas, ya que se saltan la ley orgánica de educación en su provecho partidista. Incurren en inmoralidades cuando dicen que Educación para la Ciudadanía encarna el mal y dañan y perjudican sin tino la Educación Pública en su feudo.

Una pena que ya no esté en época estudiantil, si no, me iban a oír a mí berrear para objetar de griego. Desde luego… con ese nombre… sólo se me ocurren cosas impuras, pardiez!

  9 comments for “Sinvergüenzas

  1. 7 marzo 2008 at 9:00

    El nombre no suena mal en absoluto, vamos, decir que ciudadanía suena a adoctrinamiento es, creo yo, un poquitín rebuscado.
    ¿Habéis visto algún libro? Yo sí. Y os prometo que me encantaría tener 13 años para poder estudiarlo!! Enseñan a debatir, a rebatir argumentos distintos con dialéctica, los derechos humanos, la constitución, el estatuto de autonomía de cada C.A., enseña que en este mundo cabemos todos: los altos, los bajos, los gordos, los delgados, los negros, los amarillos, los blancos, los cristianos, los judíos, los musulmanes… ¿Eso es adoctrinar? Nooooo
    ¿Tiene algo que ver con la Religión? Nooooooo
    ¿Y con la moral? Noooooo

    La polémica es puro fandango del PP…

  2. 6 marzo 2008 at 22:02

    Hombre, a mí lo de «Educación para la ciudadanía» no me parece «partidista», sino más bien «humanista», la verdad.

    Sea como fuere, tampoco veo mal la tradicional denominación de «ética», o incluso la de «civismo», de cuyas bondades por cierto no andamos sobrados los españolitos… (Lo cierto es que no se entiende de ningún modo que puedan rechazarse sus contenidos…)
    (Estas cosas sólo pasan en España…)

    Un abrazo.

  3. 6 marzo 2008 at 21:45

    El verdadero problema no es la asignatura en si, si no que ellos no puedan controlar su contenido; por otro lado, cada vez que se menciona educacion para la ciudadania a mi me viene a la cabeza la formacion del espiritu nacional y me dan escalofrios (y eso que no soy de esa epoca) ¿no hay nada que venga a tener ese contenido pero sin parecer tan partidista (ojo no digo que lo sea)? ¿que fue de la maravillosa clase de ética????

  4. 6 marzo 2008 at 20:55

    A mí el griego me gusta mucho, por mal que suene…

  5. 6 marzo 2008 at 20:17

    Bueno, Animal es que ya sabes que es muy griego…. todo él…

  6. 6 marzo 2008 at 20:04

    Bueno, esto había empezado con muy buena pinta, Mari, sobre todo la última parte de tu entrada… pero veo que vais en serio, así que yo, después de esta objeción a una asignatura que solo desasnaría a nuestros niños (y sobre todo a los suyos) y el trato a los ancianitos en la Comunidad de Madrid… me estoy planteando muy seriamente emigrar a Chipre, a practicar izquierdismo y a que no se me olvide el griego…

  7. 6 marzo 2008 at 18:01

    Daría para otro post… yo dí griego un año y con un profesor horrendo. No le tomé cariño a la asignatura, la verdad…
    Pero claro, si empezamos a objetar, encuentro que la Física o las Ciencias Naturales también se prestan a la objeción porque ¿no tiene diox nada que decir al respecto?
    Qué tropa!!

  8. 6 marzo 2008 at 17:50

    Manifiesto mi protesta más absoluta acerca de tus intenciones de objetar al griego, y especialmente por considerarlo una actividad impura…

    Chalepá tá kalá

    («Lo bueno resulta difícil»)

  9. 6 marzo 2008 at 17:46

    Le juro por cualquiera de los multiples dioses que pueblan el imaginario humano que en la primera acepción había leído Borbón. Ufff, que susto

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