Una historia real… como la vida misma

desamorUna vez, hace mucho mucho tiempo, me enamoré de un chico que no me convenía nada. Por algún motivo que hoy se me escapa, estuvimos juntos años y años. En un momento dado, se abrió el telón, ví la luz y tuve el suficiente coraje de decidir que aquella no era la vida que yo quería vivir y que pasara lo que fuera a pasar jamás me iba a arrepentir de haber tomado una decisión. (Hoy también sé que de lo que me hubiera arrepentido siempre es de no haberla tomado en aquel momento, pero esto es otra historia).

Todos hemos viajado al Planeta del amor alguna vez. Todo te parece estupendo, aunque huela a plasticorro por todas partes hasta que claro, la cosa hace aguas… y tú el ridículo…

El caso es que este chico, como no podía ser de otra forma, rehizo su vida y al cabo de unos pocos años se casó y tuvo dos hijos. Ese matrimonio no salió bien (tampoco) porque, por el camino, parece que él se encontró finalmente con la mujer de su vida. Aunque él siguió sin hacer nada, su entonces mujer tomó las riendas de su vida y decidió no jodérsela a ella y a sus hijos viviendo con alguien que no la quería y que soñaba con estar con otra persona.

Hasta ahí, comparto al 100% con ella lo que hizo…

El drama de la vida, el drama de esta historia es que ella no se contentó con el divorcio. Le hundió en la más absoluta de las miserias para siempre hasta el punto de tener él que irse fuera del país… Al padre de sus hijos, al hombre que para siempre va a ser el padre de sus hijos y la persona a quien una vez ella quiso.

¿Qué te mueve a hacer algo así? ¿Te crees superior? ¿Te hace realmente sentirte mejor? ¿Ganas algo? ¿Crees que tus hijos ganan algo? ¿Qué crees que tus hijos van a pensar de ti cuando sean mayores y se den cuenta de todo el pastel? ¿En serio te parece una opción digna para ti? ¿Y para la otra persona?

En fin, casos así suceden en nuestro entorno caaaada día. Y las personas seguimos siendo tan ciegas de no dedicarnos a lo que realmente importa que es procurar ser felices y procurar hacer felices a los que nos importan.

Es una putada que se acabe el amor, pero sucede cada día y no pasa absolutamente nada. Lo lógico sería pensar que si se te acaba el amor, como en la canción, se hable mucho y se traten de solucionar las cosas para que todas las partes sufran lo menos posible. ¿Tan difícil será?

Por añadir, por supuesto, cuando él se fue del país, se fue con aquella otra chica, el amor de su vida…
Y añado más: como hija de padres divorciados ya aviso que a los hijos no nos metáis en vuestras mierdas de mayores. Y de esto ya escribiré otro día…

Foto de Tea with Tater.

  2 comments for “Una historia real… como la vida misma

  1. 16 febrero 2015 at 15:35

    Ahí eres tú la que tienes que intentar que no les afecte a tus niños, claro… aunque, visto lo visto… pues hay gente incorregible… Pero hacerlo de mano y joderle la vida al próximo me parece lo peor, la verdad…

  2. Cristina
    16 febrero 2015 at 15:24

    Curiosa esta «guerra». Aunque fui yo quien decidí terminar la relación con el padre de mis hijos, NUNCA le haria daño, Justamente porque es el padre de mis hijos. Lo que no entiendo, es porque el, esta haciendo todo y más para perjudicar la educación y el bienestar de sus hijos porque a mi, por mucho que lo intente, ya no me puede hacer más daño. Decir que tienes un CANCER terminal cuando en realidad te vas de VACACIONES a Canadà, tienes que tener una mente retorcida.
    Me da hasta pena, la boba que ahora está a su lado y SE crew Todas sus mentiras. Sus hijos, aun pequeños, ya no se fían de él y empiezan a ver como manipula a los demás. Hasta me da cierta vergüenza haber escogido un padre como el. Hasta su familia me puso en alerta, hace cierto tiempo.

    Ahora lo que me preocupa, es solo la educación de mis hijos y como les puede repercutir.

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