Conciliación y enfermedades infantiles…

¿Y qué hace uno cuando se pone malo un hijo? Ajá, buena pregunta…
Si tienes mucha suerte, llamas a la abuela, a la otra abuela o a alguna vecina (ya lo de las vecinas me parece fuerte)…
Si no, básicamente, te jodes.

Improvisación: marido sale pitando del trabajo, donde le miran con cara muy rara porque hace sólo 24 horas les ha soltado la noticia bomba de que ya no podrá volver a hacer horas extras de 17 a 20 (hora en la que llega mamámaripuchi de trabajar)… y que, por cierto, está por confirmar que «se lo consientan». Como si las horas extras vinieran establecidas por contrato… como si pagaran por la disponibilidad de las horas de tu vida en las que NO estás en horario laboral. Uno que se acaba de poner un cristal al techo… Porque, claro, menda tiene la tinta del contrato aún húmeda y no puede pedir ni medio segundo… no vaya a ser…

Improvisación 2: llamar urgentemente a cuñada, que como vive en Logroño y está a una hora, pues que se venga un par de días a cuidar de la niña mientras se pone buena…

Solución: pinta chunga.
Podríamos buscar una persona que, pagándole, claro, nos solucionara estas papeletas… porque habrá más… es obvio. Difícil tema, porque no son animales, son dos niños pequeñitos (muy pequeñitos) de dos y de un año… ¿Dónde encuentras a alguien así a quien confiarle a tus hijos y sólo para contingencias?

Ahora estoy en caliente y no puedo pensar más allá de los confines de esta semana. Próximamente disertaré sobre vacaciones, perivacaciones y putivacaciones…. (Continuará…)

  6 comments for “Conciliación y enfermedades infantiles…

  1. Leg
    16 octubre 2007 at 20:00

    Creo que vuestra solución, claramente, es esa: encontrar a alguien de confianza.
    Es buena idea buscar entre familia y amigos (con sus correspondientes familias y amigos) a algún/a jovencito/a dispuesto, responsable y con algo de experiencia. Tampoco hace falta mucho más, puesto que será para casos de necesidad sobre todo.

    Yo creo que no es tan dificil, aunque con eso de ser casi recién llegados igual se os complica un poco más. Pero lo conseguiréis igualmente.

    Suerte.

  2. El Hermano Montgolfier
    16 octubre 2007 at 18:44

    Durante un tiempo, antes de poder usar la guardería, buscamos una persona de confianza, que por suerte era además vecina. Por una cantidad razonable se hacía cargo del niño, y de camino nos hacía la plancha. Esa puede ser una solución.
    Lo que ya es difícil de solucionar es cuando los niños van al cole a infantil. Los profesores (¿o son educadores?) no tienen la obligación de cambiar al niño si de hace sus necesidades encima, y no lo hacen. Así que cuando los niños tienen un «accidente», te llaman al móvil y tienes que ir a recoger al niño, o eso, o el niño te llega a la casa escocio vivo.
    Espero que Lara esté bien pronto.

  3. Ruth
    16 octubre 2007 at 17:55

    Está visto que las mujeres vamos más rápido que la sociedad, gran putada.
    Espero que por lo menos no sea nada grave. Un besote.

  4. Adivagar
    16 octubre 2007 at 15:33

    Buf, esa es mi pesadilla. El familiar más cercano, tanto por mi parte como por la de mi mujer, está a 700Km. Todos los años tenemos que hacer filigranas para superar las gripes, resfriados, viruelas, gastroenteritis, etc, etc, etc. Ya sabes cómo pillan todo tipo de virus los pequeños en la guarde…

    Es algo que me quita el sueño. Sé que tarde o temprano me echarán del trabajo por este tema, y es algo que me jode… como pocas cosas. Te entiendo, y es algo a lo que esta sociedad no ha dado solución. Y no es capricho, con el precio de los pisos (venta o alquiler) es una obligación que trabajen los dos. En fin, a ver que tal se pasa este invierno… (crucemos los dedos).

    Un saludo!

  5. Marimer
    16 octubre 2007 at 15:26

    Buf, jodido…
    Yo también tuve mi primera experiencia de madre trabajadora y niña enferma la semana pasada. Se resolvió diciendo en el curro que la de la gastroenteritis era yo misma. Ahora estoy con la vista puesta en los próximos puentes. En fin, a lo que iba. Por si te sirve de ayuda, tengo concertada cita con la directora de la guardería, a ver si me pone en contacto con alguien de su confianza (trabajadoras o ex-trabajadoras del centro), a las que se pueda recurrir en caso de emergencia.
    Besos, especialmente a Lara, que mejore prontito.

  6. Waki
    16 octubre 2007 at 14:51

    Uy! la cosa es complicada de carajo…yo tengo a los cuatro abuelos «disponibles» y un apañero funcionario (a una hora de coche, eso si) y aun asi muchas veces hago encaje de bolillos, que al final queda muy mono pero no veas lo que jod…. pos eso…
    Yo empezaria a buscar alguien de confianza, que me da la nariz que os va a hacer falta.
    Ojalá fuesemos vecinas…y al hilo de esto…yo tomo café por las mañanas en una mezcla de panaderia-cafeteria, pues un día dos de las chicas se quedaron con dos hijos de una cliente habitual un par de horas por que no encontraba con quien dejarlos para poder ir a trabajar (normalmente los cuida el cuñado, pero ese día no podía), asi que lo de la vecina…nunca se sabe (menos Doña Pelusona, ok)
    MUACS!

Comments are closed.

Additional comments powered by BackType