Caca blanda

ATENCIÓN: POST SOEZ.

Hoy me han llamado de la guardería a eso de las nueve y veinte, que el niño se había hecho tres cacas y dos eran blandas, que le fuéramos a buscar…

Les dije que bueno, que había estado estreñido el fin de semana y que no había estado malito ni nada, pero insistieron. Así que el bueno de marido guapo allá que se fue a buscar al niño.

Le dieron los pantalones y los calzoncillos metidos en una bolsa (sin limpiar, por supuesto, ni siquiera un agua).

El niño estupendo, claro… La caca, según marido guapo, que la vió, absolutamente normal. Blanda, pero normal.

Mañana voy a poner una queja en la guardería (a.k.a. Escuela Infantil)…

Me parece estupendo que se la cojan con papel de fumar si tienen sospecha de que un niño pueda estar malito, pero no es el caso. Lo que han conseguido es «librarse» de un niño durante un día y que su padre tenga un día menos de vacaciones…. por haber hecho una caca blanda.

¿Acaso hay que hacer caca en chorizo para que sea considerada normal? Llevo años limpiando cacas a mis hijos y las he limpiado de todas las consistencias. Sólo han estado con gastroenteritis en una ocasión cada uno.

Bastante tenemos con las vacaciones escolares y puentes y demás leñes… Lo que creo es que en realidad alguna no tenía hoy mucha gana de trabajar a la vuelta de la fiesta… que, por cierto, al próximo que me vuelva a insinuar que los sistemas educativos piensan en los niños le frío a carcajadas (de puro sarcasmo, claro)… Esta mañana, tras el puente, no había ni un niño que no estuviera llorando… Eso sí, las educadoras dabuti… las que tenían gana de currar, claro… que, visto lo visto, no eran todas…

  11 comments for “Caca blanda

  1. 6 mayo 2008 at 6:19

    Ups, y otra cosilla, Ruth… Tomás no podrá hacer gimnasia, ni jugar al fútbol en el recreo… ni correr… y si lo hace, tendrá que ser «despacio» y parando.. y si él no para, hay que obligarle a parar… Esto ya pasa ahora… y cuando yo no estoy con él, las andereños tienen que ser las que le paren. Casuística, como bien dices, hay con cada niño… pero para eso hay entrevistas con las andereños y con la directora del centro. Si me dicen que no hay problema y que le controlan, eso espero de ellas, que lo hagan.
    Muá

  2. 5 mayo 2008 at 20:08

    Esto demuestra que todo lo realtivo a las ayudas sociales a las familias es una m…

  3. 5 mayo 2008 at 19:50

    Tomasín está dabuti, Ruth… nunca lo dejó de estar…
    Entiendo que defiendas a los de «tu estirpe» pero yo también voy conociendo también a las andereños de mis nenes. Ninguna queja con las de la niña. Con las del niño sí. Sobre todo con una. Y no soy la única madre…
    Y lo de hoy ha sido una despachada como un piano. Digáis lo que digáis.

  4. 5 mayo 2008 at 18:21

    Yo ya sabes que me suelo poner de parte de las profas (pero con mucho cariño, conste), y en este caso me temo que también.
    Cada niño es un mundo, bien lo sabes tú y lo sabemos todos, lo que pasa es que cada padre y cada madre tiene uno, dos o tres mundos en casa, y las educadoras tienen veinte (o diez, me da igual) que encima no son suyos, con el peligro que ello conlleva. Me explico.
    Si Tomás se te cae en casa, te hace blando, se hace una herida, vomita, etc., tú sabrás lo que hacés con él porque le conoces mejor que nadie y sabes si es normal que cague blando por todas las razones que das, que vomite porque se acaba de meter un puñado de tierra en la boca, etc., y de ti depende llevarle al hospital, darle un jarabe o dejarle como está. Pero las educadoras no son médicas, y no tienen por qué saber la idiosincrasia de cada niño (por mucho que estemos en mayo, no son sus hijos, no los conocen como tú). Es más, no se pueden arriesgar a comparar con sus propios hijos y decir «esto es normal, a mi hijo también le pasa» porque puede venir un padre y montarle un pollo del quince por no haber hecho justamente lo que te han hecho a ti, o sea, avisar. Y también entiendo, perfectamente, que te pidieran que te llevaras al crío a casa cuando te dejaste la pastilla, porque ellas no tienen cien ojos y no pueden vigilar que no haga el bestia todo el rato. Son niños; si se les escapan a sus padres, ¿qué puede pasar en una clase llena de niños?
    Ya sé que jode, sobre todo cuando no es nada, y entiendo tu mosqueo, pero es que no hay otra solución, o al menos yo no la veo, de solucionar un problema que se puede convertir en algo gordo. Una amiga mía trabajaba en una guardería (privada privadísima) y tenían niños con fiebre todos los días. Llamaban a los padres diciéndoles que fueran a buscarles y ellos decían que ni hablar, que no podían faltar al trabajo (y no eran peones de obra, precisamente; o, peor, una era ama de casa pero le coincidía con el aeróbic). Lo siento, pero me parece bestial llevar a un niño con fiebre a la guardería, o montarle un pollo a la andereño porque se ha caído de la silla pero llevarle a clase después de que haya bajado las escaleras desde el primero de cabeza (no exagero).
    Si a un niño le pasa algo en casa, el disgusto para los padres es indiscutible. Si le pasa en clase, el disgusto es doble: por el niño y por el miedo a «qué me va a caer ahora, madre». Y de verdad que no creo que la historia haya sido sólo por no limpiarle el culo, porque otra cosa no, pero limpiar culos sí que hacen.
    Hala, qué chapa te he metido, ya lo siento. Espero que Tomasín esté bien.

  5. 5 mayo 2008 at 17:19

    Habida cuenta de que estamos en mayo… ya les ha dado tiempo a conocer sobradamente a cada nene… y Tomás aún se hace la caca encima, sea blanda dura o mediopensionista… A esa hora tres cacas… bueno, pues yo a esa hora suelo haber hecho exactamente tres cacas. Porque sí, yo también tengo fases, como la luna…

    Santi, la guarde en cuestión no es privada, es pública, y me cobran bastante pasta para ser pública, la verdad… El servicio suele ser bueno, si no fuera porque como son funcionarias, pues ya sabes, nos la cogemos con papel de fum a la mínima…

    A mí me hicieron quedarme una tarde con Tomás porque les dije que se nos había pasado darle una pastilla y que procuraran que no hiciera mucho el bestia… Me dijeron que no, que lo procurara yo…
    Me vais a perdonar, pero a mí estas cosas me ponen muy nerviosa. Los niños no son uniformes. Son niños… y dan guerra. Si no te gusta quitar cacas, repito, no te hagas educador infantil.

  6. Maite
    5 mayo 2008 at 16:36

    Yo estoy con Irka que tres cacas a esas horas no son normales, se ven normales sabiendo lo del tapon y todo eso… en cuanto a que sean blandas, las de gastroenteritis son directamente liquidas, pero bueno…
    Con los enanos hay que curarse en salud, e imagino que es lo que han hecho, ante la duda…pos eso.
    En cuanto a las pocas ganas de trabajar, eso es epidemia un lunes post puente, pero los enanos lo llevan muuuuchoooo mejor que nosotros…
    Sinceramente y sabiendo que me vas a acribillar, si yo fuese educadora y me pasase eso son un niño probablemente llamaria a sus padres, mi trabajo sería cuidar del niño y ante la más minima duda de que pueda estar enfermo avisar, y, sinceramente, el que el padre/madre pierda un día de sus vacaciones o tenga problemas en el trabajo no sería asunto de mi incumbencia.
    Otra cosa es que seamos un poquito personas y como decia un cartelito que vi el otro día en Correos «Si somos amables todos salimos ganando».
    Un beso guapa

  7. 5 mayo 2008 at 16:28

    Ni tanto, Toxcatl.. Si está malito, pues me aguanto… Es indignante lo de hoy …

  8. 5 mayo 2008 at 16:23

    En estos casos, yo obligaria a que existiera un pediatra o enfermera a disposicion del centro.- Y, desde luego, obligaria a que el niño se quedase en el centro hasta la hora normal de salida. Si está allí es porque no le podeis atender, no por capricho vuestro.-

  9. 5 mayo 2008 at 16:07

    Princesita YA VA a esa misma guardería. Me parece de tomadura de pelo, Irka, cariño… Tomás estaba hecho un rey… y, así como otras veces, puedo sospechar (o no) y tragarme lo que sea, no ha sido el caso de hoy.
    Si a las educadoras infantiles les molesta quitar cacas, que no se hagan educadoras infantiles. Los niños pequeños se mean y se cagan. Es ley de vida. Y no todos hacemos siempre chorizos perfectos: a veces cagamos blando y no pasa nada. Tomás tenía un tapón, porque es un nene estreñido, y tras la «liberación»… pasa lo que pasa… no es la primera vez… y si su «educadora» se preocupara un poquitín por él, lo sabría…

  10. Irka
    5 mayo 2008 at 14:58

    Puchita, hoy disiento. Vamos por partes.

    Que te llamen a las 9:20h porque el niño haya hecho caca 3 veces sean como sean me parece genial. A no ser que lo lleves a las 4:00, no me parece normal. Ni completas, ni parciales.

    Que des por hecho que cuando maridín va a recogerlo el niño está estupendo… me alegro de que haya sido así, pero otra vez te llamarán y efectivamente el niño tendrá una cagalera que de picor en sálvese la parte berreará como un descosido. Ojalá no te toque nunca. Cómo sabes que no es el caso?

    Lo de poner una queja formal. Hombre, pues no sé. Por una cosa así yo desde luego no lo haría. Has hablado previamente con su educadora para pedir explicaciones? No citas nada al respecto. Tampoco hablas de los términos de esa llamada telefónica. Desde luego, no es plato de buen gusto tener que abandonar el puesto de trabajo de pronto por una urgencia infantil, pero cuando desde luego lo sea no te lo vas a pensar dos veces.

    Princesita va a ir a esa misma guardería? Si es el caso, ve allanando el terreno. Una cosa será la ley, los derechos y todo lo que tu quieras, pero al final dependemos de las guarderías y yo no quisiera entrar de malas con mi segundo.

    Lol de volver al cole llorando después del puente tampoco lo comparto. Hablo de mi caso particular. Mi hijo ha entrado tan contento como cualquier otro día y alllegar nadie lloraba. Es cierto que yo ayer tarde haciendo el equipaje de vuelta ya le dije que mañana había cole, había que madrugar…

    No sé… mi conclusión es: o te ha tocado la china o ni todo ni todos son tan malos, no?

  11. 5 mayo 2008 at 14:55

    Hola, aquí hace poco entró en funcionamiento la figura de Responsable de hábitos saludables, creo que la definición era esa. Lo explico: el ayuntamiento paga a una persona para que esté localizable en el horario escolar y acuda al instante al colegio que solicite su trabajo, bien sea porque el niño se haya caído y tenga heridas y precise que se le cure, o que los más pequeños se hagan las necesidades encima y tenga que limpiarlos, etc… Con esto los padres están mucho más tranquilos y no tienen que dejar su trabajo por un rato para atender a su hijo, algo que lo mismo no podían hacer y tenían que pedir favores a familiares o amigos. Y los profes, que se quejaban que su trabajo no era ese, también más tranquilos porque ya hay una persona que atienda a los niños, sea la que sea la incidencia ‘extraescolar’ que le ocurra. Esta idea la llevaba el PSOE en su programa y la puso en marcha en cuanto que dispuso de presupuesto para pagar a esa persona. Este es un pueblo pequeño, no llega a los 10.000 habitantes y creo que se debería imponer en todos los colegios públicos.

    Suerte, D.Pero.

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